lunes, 25 de marzo de 2013

Microcuento

En la pista
  Felicitas se preparó para ir a la milonga. Se puso un vestido rojo y unos zapatos negros tan brillantes y tan altos que a su paso todos se daban vuelta.
  A llegar al baile Ricardo la cabeceó, ambos se fusionaron en un abrazo y durante los cuatro minutos que duró "La mariposa" del maestro Osvaldo Pugliese, fueron dos corazones en un solo cuerpo.

                                                                        Vivi García

jueves, 10 de enero de 2013

Rincones de Buenos Aires

                              Miradas... en Flores                          por Vivi García

                                                    requetecuentos@hotmail.com

  El patio del Centro Cultural de Flores, "Marcó del Pont", aquel día, parecía una pintura de la primavera. Viernes, seis de la tarde, la milonga comenzaba... En el lugar estallaban las glicinas, con sus flores azules que caían en racimos perfumándolo todo. Sonaba Osvaldo Pugliese... Las señoras se ponían los zapatos con pulsera y acomodaban sus abrigos livianos en las sillas. De repente, hombres y mujeres se amalgamaron en un abrazo cerrado que les permitía "sentir" cada tango... Pasos largos, pisadas seguras, brazos firmes... El vuelo de la danza acababa de comenzar. Los pies dibujaban sobre las baldosas coloradas encajes estrafalarios. Sin duda, esa Casona histórica y bella ofrecía, aquel viernes, el marco ideal para albergar semejante fiesta para los sentidos: un aroma azulado, nuestra música y el movimiento armónico de cada pareja. ¡Hasta las esculturas de la sala contigua se movían! Es que en lugares así... todo es posible.

  Cuando la tarde comenzó a hacerle un lugarcito a la noche, las farolas del patio se encendieron, y como en un cambio de escenario, los protagonistas continuaron haciendo su mejor papel: el de bailarines, bailarines apasionados, felices, completos en la fusión de los cuerpos.

  Y cuando la música cesó, poco a poco, la escena se fue desarmando: los zapatos para soñar volvieron a sus bolsas, cada cartera a su mano, y un "hasta el viernes" salió de cada boca. "Se acabó, el sol nos dice que llegó el final...", dijera el Catalán... Sólo siete días habría que esperar para un próximo encuentro, un nuevo abrazo.
  Nuestra ciudad tiene lugares mágicos, éste es uno de ellos. El Centro Cultural está ubicado en la estación Flores del Ferrocarril Sarmiento, un sitio de ensueño con salas, galerías, jardines, exposiciones permanentes y diversas actividades. ¿Qué esperás para conocerlo?

Centro Cultural Marcó del Pont

Artigas 206, Flores.

Te. 4611-2650